Balance del programa Jóvenes Corresponsales del Uruguay

Una experiencia inolvidable

Jóvenes Corresponsales reunidos en Tres Cruces
Fotografía: Vince Alongi

Fiel a su misión cultural, la Embajada de los Estados Unidos en Uruguay, continúa apostando a los jóvenes del país. Con el lanzamiento del programa “Jóvenes Corresponsales del Uruguay”, nuevos conocimientos y un mayor entendimiento del campo periodístico se incorporaron a 18 jóvenes que pretenden en el futuro especializarse como periodistas no solo teniendo una formación académica sino también de valores que sin duda serán muy importantes en el desempeño de la profesión. En cada seminario del programa y gracias a los organizadores y dirigentes del mismo, se explicitaron una serie de aspectos fundamentales que tendremos que tener en cuenta a la hora de ejercer nuestro trabajo y que nos identificarán como personas nobles, justas y veraces.

En lo personal, no puedo decir sino que mi felicidad es completa al ser parte de un programa de tales características. Aún recuerdo el llamado de Rubek Orlando, Director de Prensa de la Embajada, confirmándome que era una de las 18 afortunadas y que formaría parte de próximos seminarios de capacitación en donde se nos haría entrega de elementos necesarios para el desarrollo de posteriores actividades. Una emoción extraña brotaba en mí ya que entre risotadas y llanto le contaba a mi familia la noticia y lo contenta que estaba. “No lo puedo creer” repetía una y otra vez.

Finalmente, llegó el tan esperado primer seminario en la ciudad de Montevideo y como no podía ser menos, la calidez humana y cordialidad por parte del staff de la Embajada estuvo presente a cada instante. Muchos nervios pero a la vez tranquilidad recorrían mi cuerpo. Nervios, por no saber lo que me esperaba y tranquilidad porque si bien no lo sabía, estaba segura de que estaba entrando en un mundo de desafíos, tal como a mí me gusta. Diferentes charlas tuvieron lugar en esta primera instancia; cada una de ellas de carácter provechoso. Escuchar, tomar nota y preguntar fueron las reglas desde el principio a las que creo ninguno tuvo problemas de adaptarse.

Semanas más tarde, en la ciudad de Nueva Helvecia, departamento de Colonia, tuvo lugar el segundo seminario que fue tan agradable como el primero, aunque esta vez, con una característica diferente. Ser anfitriona del evento, le otorgó un sentido especial y fue una experiencia de gran responsabilidad, si se quiere. Recibir a todos los corresponsales así como a los dirigentes del programa y a Iscar Blanco fue muy satisfactorio. Poder mostrarles al menos una parte de la Colonia Suiza, Nueva Helvecia de alguna manera me complació.

El tercer encuentro, nuevamente en la capital del país, contribuyó a tener una visión de otro tipo de periodismo; el político. Conocer a Luis Alberto Lacalle, actual senador y al Vicepresidente de la República, Danilo Astori,  permitió comprender como funciona el periodismo en el ambiente político y nos posibilitó entender que no es para nada fácil y se requiere de mucha responsabilidad y veracidad a la hora de publicar información a la audiencia. De otra forma, muchas consecuencias puede contraer.

Desafortunadamente, no pude concurrir a las charlas del ex Presidente,  Julio María Sanguinetti, así como tampoco de Hannah Rosenthal y William Owen (Consejero de Asuntos Políticos, Económicos y Comerciales) ya que debí asistir a un examen internacional de inglés. De todas maneras, no tengo duda alguna de que fueron excelentes y gracias al equipo de la Embajada, pude ver por medio de un video, la charla de la Enviada Especial del Presidente Obama y Directora de la Oficina responsable de monitorear y combatir el antisemitismo, Hannah Rosenthal.

Muchas de las frases de las que tomé nota en los diferentes seminarios, recorren mi cabeza en este momento. "Pensar en grande, sin miedo y diferente", "La clave es tener sentimiento y ganas de transmitir algo diferente",”Si una nota no despierta una sonrisa, una lágrima o una polémica, no significa nada”. Frases que me hacen reflexionar y reconsiderar mi actitud ante los diferentes eventos que se suceden a diario en mi vida.

Hace poco estuve investigando más acerca de Deborah Potter y una de sus frases maestras me quedó marcada a fuego. "El reportero tiene que estudiar mucho y recorrer la ruta". El programa "Jóvenes Corresponsales" se ha convertido en una excelente herramienta para recorrer parte del camino, no sólo dándome un -título de Corresponsal- sino además entrenándome y aportando el impulso que todo principiante necesita.

Actualmente, no tengo duda de que el periodismo es lo que quiero seguir en el futuro. A través del programa me doté de seguridad, convicción y confianza en mi misma, eliminando algunos miedos y temores. El alcance que ha tenido el programa ha sido estupendo. Cada vez que alguien me ve en la calle y me felicita por mi labor me siento muy contenta y me complace de escribir para ellos. Ahora, realmente entiendo el placer que se siente al tener un público por más pequeño que sea.

En cada momento se unen el pasado, el presente y el futuro. El pasado haciendo referencia a los conocimientos obtenidos durante los meses de seminario, el presente haciendo mención a la labor de Corresponsal que desempeño para la Embajada y un futuro advirtiendo el advenimiento de una carrera en comunicaciones enfocada al periodismo.

Me siento encantada de ser una joven Corresponsal y de ser representante de mi departamento y del Uruguay así como de estar vinculada con la Embajada de los Estados Unidos de América.

EE.UU. y Uruguay mantienen una relación muy fuerte a través de ideales compartidos como la libertad y la democracia y se esfuerzan día a día para expandir ese modelo al mundo entero. La innovación, el deseo de expandir la educación, promover la paz y luchar por un futuro mejor son algunos de los aspectos más importantes que ambos países preservan. Hoy en día, poder ser testigo de eso por medio de un programa llamado “Jóvenes Corresponsales del Uruguay” es invaluable y aumenta mis ganas de seguir adelante con mis proyectos y metas.

Agradezco de todo corazón, a los que hicieron posible que hoy el programa esté en pie y se esté llevando a cabo exitosamente. La Embajada sigue sorprendiéndonos a cada uno de los Corresponsales de una manera sumamente positiva. El entusiasmo y las ganas de servir a la comunidad a través de la palabra viven en mí desde la mañana hasta la noche.

Helen Bernatzky Köhli